| Cuento: | 5. ¿Por qué tenemos que ir a la escuela?
Es jueves por la tarde y Daniela ha tenido demasiada tarea durante la semana. Quisiera descansar y dormir hasta que vuelva a ser lunes pero aún hay clases al día siguiente.
La abuela de Daniela ha preparado un delicioso pan de naranja y chocolate con leche para ver juntas la televisión; sus papás están por llegar del trabajo. Todo parece tan cálido, tan abrigador que no encuentra el argumento adecuado para pedir permiso de quedarse en el suave sofá y no ir a la escuela.
¿Por qué tenemos que ir a la escuela si la casa tiene un clima tan agradable y comida tan apetitosa?
(Los padres de Daniela han llegado a casa)
Daniela: ¡Papá! ¿por qué tengo que ir a la escuela?
Papá: Para ocupar nuestro lugar en un futuro.
Daniela: ¿Yo también voy a ser Contadora?
Mamá: Nos gustaría mucho que así fuera.
Papá: Cuando los papás planean la llegada de un bebé de alguna forma están previendo dejar a alguien en su lugar cuando ellos se retiren a descansar y otras veces es porque su trabajo es tanto… que necesitan ayudantes…
Nosotros tenemos mucho trabajo y si alguien más hiciera las cosas como nos gusta; estaríamos tranquilos, tal vez llegaríamos más temprano a casa y podríamos divertirnos juntos por más tiempo.
Mamá: Para que tú nos ayudes tienes que estudiar… Además el pan de naranja, el delicioso chocolate, la televisión y la energía eléctrica para hacer uso de la televisión sólo se obtienen con el dinero que nos pagan por nuestro trabajo pero ese trabajo lo podemos realizar porque fuimos a la escuela a que nos enseñaran a resolver los problemas que precisamente solucionamos día con día.
Abuela: Si tu no vas a la escuela no vas a resolver ningún problema de la sociedad ni recibirás ningún pago para poder comprar o hacer todo lo que te gusta.
Papá: A veces las semanas son agotadoras y algunos profesores dejan tareas excesivas pero siempre hay una recompensa; tu tiempo de vacaciones que es largo y puedes dormir o hacer todo lo que desees.
Mamá: Los fines de semana son como unas muy pequeñas vacaciones; tal vez podríamos comentar en la junta de padres de familia sobre una petición especial para que en los descansos no les dejen tarea pero a cambio hay que trabajar duro los días en que corresponde ir a estudiar.
Daniela: Me gustaría mucho eso… Que no nos dejen tarea en vacaciones ni en fin de semana.
Papá: Aunque no podemos asegurarte nada, haremos todo lo posible porque así sea comentándolo con los profesores.
Mamá: Bueno vamos a hacer algunas compras mientras ustedes terminan de ver su programa.
Daniela: Si, Gracias por escucharme… y comprenderme.
(Los papás de Daniela sonríen y se marchan).
Enseñanza:
Comunicación, unión y convivencia familiar, respeto a la autoridad y normas sociales, reconocimiento al esfuerzo, empatía, amor al estudio y al trabajo. |
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