Miguelito
Con el vientre ya un poco abultado Esmeralda se ha sentado en el jardín a leer un libro para preparar su clase…
Con alas tan blancas que parecen casi transparentes; Miguelito revolotea sobre las flores y trata de interpretar lo que su mamá lee. Casi todos los días escucha cosas sobre números y unos informes.
Todo es nuevo y parece tan interesante… En las tardes Miguelito se cobija en el cuerpo donde habita y mientras escucha dos o tres programas de televisión toma helado de vainilla, después se duerme hasta que escucha que ha llegado su papá.
Platican tan bonito que él también quiere tener una pareja; mientras escucha, disfruta con ellos del té y pasteles con chispas de un chocolate delicioso. José cuenta los problemas cíclicos del trabajo y su esposa escucha con atención; ha aprendido a sacar ventaja de los problemas cotidianos y ocupa todo esto en algo que llama método de caso.
Después de poco más de ocho meses de vivir unido a su madre, Miguelito presta más atención que nunca a todas las conversaciones sobre todo cuando visitan al Médico y es que esta ocasión han cambiado nuevamente ¡por Dios… es el cuarto Médico que consultan!. Parece que nadie se da cuenta de la enorme barriga de mamá, nadie quiere programar su llegada…
Agitando sus alas Miguelito se acerca al oído del Médico para persuadirlo sobre una cesárea; él no quiere hacer sufrir a su mamá… Después de algún tiempo y una explicación sustentada se programa la llegada del niño el Lunes por la mañana.
Las contracciones inician a las 12:00 a.m., ya es Lunes; todo pasa rápido… y siguiendo las indicaciones de un cuerpo de Médicos, Esmeralda escucha un enorme grito…
Es Miguel Ángel que ha llegado a este mundo…
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