: Nuestra promesa

Nombre*:Rocío Ferrusca
Género*:Narrativa
Título*:Nuestra promesa
:¿Alguna vez pensaste por qué la luna siempre está sola?
Una mujer de piel y cabello blanco, ojos grises, alta, delgada, muy hermosa caminaba en el Edén en completa oscuridad, se sentó un tiempo para descansar y poco a poco fue entrando en un sueño profundo.
- Clara, Clara… ¿Me escuchas?
- Te… te escucho, pero dime. ¿Quién eres? – Quería alejarse, a la vez sentía curiosidad.
- No creo que me conozcas, soy quien da a luz a tus días, quien ilumina cada uno de ellos, quien concede la vida.
- ¿Por qué estás aquí?
- Necesito algo de ti, pero lo sabrás pronto.
Clara despertó de su sueño mientras observaba cuan oscuro estaba todo, los días pasaban y esos días se convertían en meses, en años…
- Clara. ¿Aún me recuerdas? Ahora es cuando te necesito.
- ¿Qué quieres de mí? – Clara no podía ver más que un resplandor de luz.
- Ya lo verás, con el tiempo te darás cuenta, te quiero conmigo.
No tenía idea de que estaba pasando, no sabía si era real o no, lo poco que sabía le parecía completamente extraordinario, con el paso de unas semanas comenzó a ver que su vientre crecía como si estuviera encinta, de este provenía una luz tenue, pero que jamás se apagaba. Una noche fue a bañarse al río, el collar de perlas que llevaba en el cuello se cayó, como su vientre ya era demasiado grande no podía inclinarse mucho, con cuidado se acomodó sobre una piedra grande mientras notaba como la tenue luz se intensificaba.
-Clara, ha llegado el momento en el que estaremos juntos eternamente, la prueba que te he encomendado casi termina y puedo estar seguro de que no me dejarás solo en esto. Ponte en pie y sube la montaña más cercana al río, cuando hayas llegado busca el lugar más tranquilo y silencioso que puedas encontrar, te estaré esperando ahí y sólo si tú lo permites conocerás lo que siempre esperé.


Tenía miedo, mucho y su vientre la hacía sentir muy cansada, se levantó camino a la montaña que ese ser extraño le había mencionado, al llegar a la parte más alta se sentía agotada, casi a punto de rendirse por no encontrar un lugar con silencio total, dio unos pasos y el lugar quedo tranquilo, sin ruido, como lo que estaba buscando.
- Me he dado cuenta que aceptaste lo que te pedí ahora recuéstate, serás aquella dama nocturna que proveerá de luz a lo que hasta hoy siempre estuvo en tinieblas, tu vientre que bastante ha crecido dará a luz a miles de hijos de nombre estrellas que te harán compañía, yo te cuidaré siempre aunque no puedas verme, mientras tu descansas yo daré luz al mundo y cuando sea de noche, el fruto de nuestro amor y promesa estará contigo iluminando a tu lado, dando la luz y consuelo necesario a quien lo necesite.
Comenzó a sentir dolor, con el pasar los minutos fue disminuyendo y noto como su cuerpo se llenaba de luz mientras se elevaba al cielo. Desde ese momento la luna es redonda cuando espera a más estrellas dentro de sí, en forma de uña cuando apenas nacen y necesitan estar en su regazo y nueva cuando ese ser que nadie ha logrado ver está con ella, dando los nuevos frutos, la nueva vida, la nueva promesa…
Powered by EmailMeForm



1 comentario: